jueves, 30 de agosto de 2012

PEREGRINANDO HACIA SANTIAGO DE COMPOSTELA

Como ya adelanté en anteriores entradas el final de este verano de 2012 sería un tanto especial. Ha llegado el momento. Hoy 30 de Agosto comenzará el Camino de Santiago. Y digo comienza el Camino porque aunque la peregrinación propiamente dicha la iniciaremos en Ponferrada mañana día 31, el Camino comienza en el umbral de la casa de cada uno cuando, mochila a cuestas, comienza a avanzar hacia Compostela. Y eso precisamente es lo que haremos hoy Jesús Cecilio Velascoín, su hijo Alberto, mi padre y yo. Cruzaremos el umbral de casa dirigiéndonos ya, paso a paso y siempre de frente con buen espíritu de martillo y trabajadera, hacia la estación del AVE para iniciar nuestro avance, y por ende Camino, hacia Santiago.
En esta entrada narraré la peregrinación que vamos a realizar, comentando las etapas, distancias aproximadas, etc. El punto de inicio de la Peregrinación será Ponferrada, ciudad de León que toma su nombre del latín "Pons ferrata" que significa "Puente de Hierro". Desde allí empezaremos la primera etapa que nos llevará hasta el corazón de la comarca bierzana, donde descansaremos y pernoctaremos en Villafranca del Bierzo. En el albergue deberemos tomar fuerzas pues al día siguiente nos aguarda, sin duda, la etapa más dura del Camino Francés, a su vez luego la más recordada y comentada por su extrema dureza y sacrificio así como por la recompensa moral y la fortaleza psicológica de haberla superado. Hablo de la etapa reina del Camino de Santiago: Villafranca del Bierzo - O Cebreiro. Aproximadamente 30 kilómetros de etapa de los cuales los 7 u 8 últimos son de una muy exigente subida entre los pueblos de Herrerías, La Faba, Laguna de Castilla y la comarca de Pedrafita del Cebreiro. Sin duda es una etapa especial y traslada al peregrino por mágicos enclaves al abandono de Castilla León y al inicio de la aventura de recorrer Galicia. Llegados al cúlmen de la subida del Cebreiro dormiremos en una Pensión llamada Venta Celta y al día siguiente continuaremos la ruta hasta Triacastela, nombre también proviniente del latín, cuyo significado es "Tres Castillos". La etapa es en gran medida de bajada, si bien y antes de iniciar el descenso, la serranía da sus últimos coletazos dejando repechos tan durísimos como el Alto de San Roque y el Alto do Poio, punto de los más altos del Camino de Santiago, sólo superado por la Cruz de Ferro. Pasito a pasito llegamos a la ciudad de los Tres Castillos y allí visitamos los monumentos y descansamos. La siguiente jornada no es complicada en exceso, aunque conviene recordar que ninguna jornada es sencilla o fácil, todas tienen sus momentos duros; recorremos otro tirón y haremos Triacastela - Sarria. En Sarria alcanzaremos el punto de inicio del Camino para muchos peregrinos que por tiempo o condición física no pueden hacer sino los kilómetros mínimos a pie para obtener la Compostela. Para obtener la Compostela (documento expedido por la Catedral de Santiago que acredita que el peregrino ha recorrido los kilómetros exigidos para cumplir la Peregrinación "pietatis causa" -como mínimo 100 kilómetros a pie o 200 kilómetros en bicicleta-) Sarria tiene una excelente ubicación, pues dista de Santiago a unos 112 kilómetros y por ello mismo se convierte en un conocidísimo punto de salida de muchos peregrinos. Desde Sarria la etapa concluye en Portomarín y es una jornada que no defrauda ni al avezado peregrino  ni al novicio. Llegados a Portomarín partiremos al día siguiente hacia Palas O Rei, una etapa más bien feona, cruzando muchas veces la carretera nacional y caminando largos tramos de asfalto, pero etapa que hay que hacer para seguir haciendo el Camino y cumplir en todos sus puntos. No por feucha o dura una etapa pierde su esencia de parte del camino y te regala otra experiencia. Vislumbrándose ya el final, la siguiente etapa vuelve a exigir un duro esfuerzo: Palas O Rei - Arzúa. Una dura etapa conocida como la rompepiernas por los continuos toboganes de la orografía gallega, siendo además una jornada larga de unos 32 kilómetros. Una jornada que sin duda no te deja indiferente y donde el peregrino comprueba que la dureza del Camino (y su satisfacción final) no emana sólo del Cebreiro. Tras descansar merecidamente en Arzúa y regalarnos una buena cena cuando amanezcamos continuaremos la marcha siendo el trayecto desde Arzúa hasta Pedrouzo (Arca O Pino), una etapa más corta y relajante que la anterior, sin olvidar, como antes mencionaba, que toda etapa tiene sus repechos y ésta no va a ser menos. Para culminar y con la agridulce sensación de llegar a Santiago y de que el camino concluye, haremos la última etapa: Pedrouzo (Arca O Pino) - Santiago de Compostela.
En estos días ya sabéis mi cometido. Estaré peregrinando hacia la Compostelana capital gallega. Será sin duda un viaje magnífico y relajante mental y físicamente (por extraño que parezca). El Camino de Santiago te regala sensaciones únicas e iguala a toda persona en una misma palabra, en un mismo sentido, en una misma acepción: Peregrinos.

Al fin y al cabo al final de la partida el peón y el Rey vuelven a la misma caja, mientras tanto... ¡¡Buen Camino!!

jueves, 23 de agosto de 2012

UN ENCUENTRO ESPERANZADOR

Como dice El Arrebato al inicio de una de sus canciones "Cuando menos te lo esperas va la vida y te sorprende..." Y bien cierto que es. Como todo buen lector de este blog que se precie sabrá he estado una semana en Nueva York hace unos días, gozando de la compañía de mi  mujer, de mi hermana y de mi compadre y hermano que la vida me ha regalado, Narciso Orovio. Uno de los lugares a visitar y de obligado cumplimiento en la Gran Manzana es la llamada Zona Cero. Se encuentra al sur de la isla de Manhattan y ocupa el centro del distrito World Trade Center, donde se ubicaban las Torres Gemelas hasta su destrucción por el atentado terrorista más grande de la historia del mundo. Quedan escasos días para que hayan transcurrido once años desde aquella masacre y todavía se emociona hasta el más duro de alma al pasar por el lugar. Las calles aledañas son un panteón originado a base de recuerdos, fotografías, escritos, monumentos, memoriales, lágrimas y llanto.
En el rinconcito se aprecia la vela.

Y allí en un rincón te encontré. Hay flores de todo tipo, escritos de todo tipo y en todas las lenguas del hombre. Memorándum plagan el lugar y había una pequeña vela. Sólo una. Era curioso que con todas las flores y reliquias que hacen llorar al alma recordando y mostrando a tumba abierta lo que pasó, tan sólo hubiera una vela, una única, solitaria y pequeña vela. ¡Pero qué luz da esa vela! Se me saltaron las lágrimas al verla. Si ya llevaba el alma a flor de piel transitando por la zona y recordando el derrumbe de las Torres fue verte y llorar. Mi corazón exclamó: "¡¡Madre!!, ¿cómo has llegado Tú aquí?" Una sonrisa desde el Cielo me respondió: "Atrevido, siendo quien soy, ¿dudabas de que estuviera aquí también? ¿No dices tú mismo que siempre te acompaño y soy la Esperanza del Mundo?" Me quedé helado, sin palabras y mi alma con júbilo fue quien contestó: "En verdad eres grande, Mamá, eres la Madre de Dios y la Esperanza del Mundo. Yo te imaginaba allí en San Gil, recibiendo las oraciones de todo el mundo; lo que no me esperaba era verte en la otra orilla del mundo, allí donde brotaron las cinco verdes esmeraldas que Gallito te trajera para realzar tu belleza. Por eso Reinas habrá, pero como Tú ninguna, Macarena".
Esperanza Macarena en Nueva York.

Sin duda fue el encuentro que más me ha impactado con Ella. Me la encontré radiante en su paso el día de su 400 cumpleaños en la Bética urbe, allá por Septiembre de 1995; fue entonces cuando juré que algún día sería su Hijo y hermano de su Cofradía y hoy ya lleva siendo así varios años. Me la encontré también casualmente en una pequeña iglesita del Camino de Santiago en el Año Santo 2010, una dura jornada cuando mis fuerzas físicas y morales flaqueaban Ella apareció, tan radiante como siempre, en una pequeña estampa de un panel de anuncios en Boente de Abajo. Allí había esperanza para todo peregrino. Retomé la marcha con savia renovada y llegué feliz al albergue. Me la he encontrado también en múltiples ocasiones allá donde la mano de una Hermanita de la Cruz da un mendrugo de pan a un mendigo. La he encontrado en los lugares más recónditos que pudiera imaginar y, por si me quedaba alguna duda de su poderío y grandeza, allí estaba Ella repartiendo esperanza al pueblo americano desde esa pequeña vela, donde su imagen se me hizo más bella que  nunca por el lugar donde nos encontramos, por lo que allí significó y porque algún macareno del mundo la hubo llevado hasta allí por voluntad celestial que única y exclusivamente emana de la calle Bécquer de Sevilla y del Arco de la Macarena que da triunfal entrada a la calle San Luis. Para mí Ella es lo más grande que hay y así lo manifesté en una de las primeras entradas de este humilde blog. Por eso mismo, un detalle tan pequeñito como una vela me hizo llorar. Los macarenos me entenderán. No era una vela cualquiera. Era una vela verde de la Esperanza Macarena. Y estaba allí donde nosotros nunca habríamos esperado hallarla. La Esperanza está en todo el mundo. Demostrado queda.

Un encuentro esperanzador. Un encuentro inesperado como siempre. Un encuentro imprevisto y que jamás habría imaginado. Un encuentro que sólo Ella hizo que fuera posible. ¿Cómo iba yo a pensar que la Macarena estaría presente en Nueva York? Si bien y siendo aristotélico y metafísico, como a mí me gusta, indagando siempre en el origen y el por qué, la pregunta es:
¿Cómo no iba a estar Ella repartiendo la Esperanza que lleva por nombre a toda persona que la necesite en cualquier confín del Mundo? No podía ser de otra manera.
Es necesario llevar la esperanza a un lugar como este y sólo Ella puede hacerlo. Con algunas fotografías intentaré acercaros el dolor que emana el lugar para que podáis entender mejor lo impactante que es verlo in situ y por ende lo grandioso que fue para mí, macareno cerrado y confeso, encontrarme con Ella allí. Una de las fotografías sigue haciéndome llorar. Es un dibujo de un niño pequeño que lleva por título "Así murió mi papá" y muestra las Torres Gemelas, los aviones y los bomberos bajo el prisma de un niño de no más de cinco años. Doloroso donde lo haya y más merecedor de la Esperanza de la Madre de Dios que nada en el mundo. Ya lo dijo el Rabí de Galilea: "Dejad que los niños se acerquen a Mí". Otra de las instantáneas es un mural con manos en blanco que gentes de todos los lugares han dibujado, coloreado y escrito dejando sus mensajes de ánimo, recuerdo o simple y duramente preguntándose y preguntándonos el por qué de esta barbarie. Os dejo con las fotografías. No os dejarán indiferentes.

Memorial del atentado.
"Así murió mi papá".
"¿Por qué?"



Por eso, cuando la gran construcción que el hombre está levantando allá donde estuvieron las Torres Gemelas, construcción que lleva por nombre Torre de la Libertad y que para los amantes de los datos curiosos diré que desde Marzo de este año de 2012 ya es superior en altura al Empire State, cuando se culmine dicha obra no será sino otro de los faros de Esperanza que ilumina al Mundo, porque para el que lo crea y para el que no también, Ella está siempre. Y así lo demuestra. Esta mera anécdota no es para mí sino el mejor encuentro de Esperanza que he tenido en mi vida. Siempre lo recordaré y cuando fallase mi fe tendré de nuevo Esperanza con tan sólo recordarlo. Por ello, no puedo sino despedir esta entrada con el poema que todo macareno (europeo, americano o de dónde sea) sabe y recita a modo de oración cual Pirata de Espronceda a ritmo de "Con cien cañones por banda, viento en popa a toda vela, no cruza el mar sino vuela..."



Pero como Tú, ninguna,
Estrella de la Mañana
de Morena de Juncal,
y de Gracia Sevillana.
Pero como Tú, ninguna,
porque Tú eres la Giralda
en repique de alegría
por los caminos del alba
y también Torre del Oro
entre espumas recamada,
y Guadalquivir de encajes
con orilla de esmeraldas,
para que en sus cauces navegue
tu Pena de Sal Amarga.
Pero como Tú ninguna,
porque Tú eres la bandera
del candor y la ternura,
rincón de amor y ventura
y eres su calle de Cielo
y eres su Plaza escondida,
y eres cristal de sus fuentes
y eres Luz de sus esquinas,
y eres Flor de sus jardines
y eres venda de su herida,
y eres su Escudo de Gloria
y eres Sangre de su vida,
y eres árbol de su sombra
y eres Rosa de su espina
y eres Ala de su vuelo,
y eres Campana en su arista
y eres Perfume en su ambiente,
y eres Color de sus días
y eres Copla en sus sentires
y eres Faro y su Guía.
Por eso a Ti, Macarena,
talla en jardín de brisas,
con las Gubias Celestiales
del Dolor y la Sonrisa,
Te hicieron la Soberana
De las Legiones Divinas,
Te coronaron de estrellas
Te proclamaron Bendita 
y te bajaron los Ángeles
para dejarte en Sevilla.
Por eso Reinas habrá
Pero como Tú... ¡ninguna!


SPES NOSTRA
MATER DEI.

miércoles, 8 de agosto de 2012

VIAJE A NUEVA YORK (7ª PARTE)

Pues sí. Llegó la hora. El reloj cuenta atrás finaliza su función e indica que sólo quedan unas horas para que llegue el esperado día. Hoy empieza el viaje. Esta  noche saldremos en AVE hacia Madrid donde pernoctaremos en casa de nuestra amiga Alicia y su novio Javi (que por cierto se nos casan ya mismo). Mañana sobre las 07:30 horas estaremos en la Terminal 1 del Aeropuerto de Barajas y a las 10:25 horas despegará el avión que nos llevará a la Gran Manzana. Allí ya sabéis lo que haremos pues os he ido contando las rutas y excursiones programadas en diversas entradas anteriores. Sin embargo os debía una entrada y aquí está. Os anticipé que sería la última pero que habría una más sobre el gran viaje y ahora derramo letras dándole forma al post. Tan sólo espero que todos podáis visitar alguna vez Nueva York y comprobar por vosotros mismos todo lo que os he ido contando en las entradas referentes a esta enorme y cosmopolita urbe. Merece la pena y no poco.

Los últimos retoques han sido realizar el cambio de moneda y solicitar vía on line el ESTA. El ESTA es un visado (aunque los americanos dicen que no) que hay que solicitar y expedir obligatoriamente para viajar y acceder a Estados Unidos. Digo que es un visado (aunque los americanos digan que no) porque para que te expidan el mismo hay que abonar anticipadamente una tasa, lo que implica que estás comprando un permiso de acceso a un determinado lugar, lo que viene siendo... ¡¡un visado!! (por más que los americanos digan que no). Bien, pagada la tasa del ESTA hay que rellenar un curioso formulario (americanada pura) donde te preguntan cosas como si has tenido algo que ver con la Alianza Nazi alemana de la Guerra Mundial, si te has opuesto a la adopción de un niño estadounidense, si tienes alguna enfermedad contagiosa que pueda poner en riesgo la salud del pueblo estadounidense, etc. Y no estoy de cachondeo, ¿eh? Preguntan eso. Y lo que es más, como dan por hecho que todo el mundo dirá que "no a todas las preguntas", cuando por fin te expiden y envían el ESTA te hacen saber muy claramente: Usted puede viajar a los Estados Unidos de América y es apto para entrar en el territorio americano, no obstante, en la aduana, personal cualificado estadounidense tomará la decisión final". Dícese que con el ESTA o sin el ESTA, con tasas o sin tasas pagadas, con visado o sin visado, con pasaporte o sin pasaporte, como en el control de acceso fronterizo del aeropuerto no le caigas en gracia al personal no accedes a los Estados Unidos de América. Así de fácil.

La primera toma de contacto se produce en los accesos a la recogida de equipajes. Antes siquiera de recoger las maletas hay que pasar el control y hasta que no pones un pie legalmente al otro lado del control no tienes derecho a nada, eso sí, superado el control eres "ciudadano americano".
El control comienza con la toma de huellas. Hay un dispositivo en el que hay que poner la huella del pulgar de la mano derecha y, tomada ésta, la de los otros cuatro dedos de la mano. Acto seguido igual pero con la mano izquierda. Prestadas las huellas de los diez dedos, sí de los diez, de todos, no es como aquí para sacar el D.N.I. que bastan dos, comienza la sesión de fotos. La primera foto es general del tronco y cara, vamos como los presos. La segunda foto es exclusivamente de la retina ocular. Flipante pero cierto. Y con esa foto comienza la inspección pura y dura acerca de tu persona para determinar si eres realmente apto (aunque el ESTA diga que sí) para pasar a Estados Unidos. El ritual es el siguiente. Tus huellas dactilares y tu foto de la retina son enviadas vía intranet rápidamente al edificio central del F.B.I. situado en Whasington. Allí se procesan tus datos y se emite respuesta ultra rápida al acceso de control aeroportuario. Insisto en que lo que narro es real. En ese proceso que dura apenas tres o cuatro minutos, el funcionario, policía o agente que te está atendiendo te hace varias preguntas para entretenerte a modo "¿A qué vienes a Estados Unidos?", "¿Has estado ya alguna vez?", "¿Cuánto tiempo vas a estar?" y sin duda la mejor: "¿De dónde eres?" Mmmm, el personal cualificado y con mi pasaporte y mi D.N.I. en sus manos y en el mostrador, me pregunta que de dónde soy. Inquietante que no vean que soy español teniendo ellos mi documentación y estando fichado por el F.B.I. (que lo estamos todos, por cierto). En fin... americanos. Hechas las preguntillas de rigor para ganar tiempo y que el F.B.I. diga si soy apto o no (como en Selectividad, jaja) desde Whasington se emite una respuesta y la misma se refleja en el acceso. ¿Cómo? Muy fácil. Bajo el mostrador y a la vista de la persona que te atiende hay un pequeño semáforo en posición horizontal. Dependiendo de la respuesta tramitada y dada por el F.B.I. se enciende una luz u otra. Si se enciende la luz verde, el policía de turno te dirá muy sonriente el clásico "Welcome to the U.S.A.", podrás girar el torno y ya sí que sí eres ciudadano americano. Si la luz encendida es la amarilla o ámbar, la cara del policía se tornará seria y te dirá que puedes permanecer en Estados Unidos pero que estarás bajo control y permanentemente vigilado. Si el semáforo desprende luz roja, sin mediar palabra te arrestarán y te devolverán a tu país de origen en el siguiente vuelo hacia el mismo. Sin más, sin recoger equipaje ni nada. Lógicamente para que esto ocurra hay que tener unos antecedentes penales más que curiosos y el F.B.I. no te querrá ni ver por su país. La verdad es que a turistas normales, como nosotros, el semáforo nos deja pasar sin problemas; eso sí, que el F.B.I. nos tenga a todos fichados para decir si somos aptos o no, mosquea mucho. Hay que hacer el paripé hasta que Whasington dé luz verde a nuestra estancia.

Pues queridos amigos, el vuelo y el acceso de controles son los últimos escollos a evitar. Ya tenemos todo organizado y las maletas listas. Tenemos dólares y pasaportes en regla. Tenemos muchas ganas de que empiece esta magnífica aventura y los billetes de tren nos arden en las manos ya. Os pondré fotos cuando volvamos. Os regalaré una entrada fotográfica con algunos de los grandes momentos que vamos a vivir estos días. Prometo disfrutar por todos vosotros. Y ahora durante estos días disculpad mi ausencia. Ya se abren los controles... ¡¡Pasajeros al tren!!

GO TO THE UNITED ESTATES OF AMERICA!!

sábado, 4 de agosto de 2012

EXCUSATIO NON PETITA, ACCUSATIO MANIFIESTA


Quiere decir el latinismo jurídico que da título a esta entrada que la excusa dada sin ser pedida no es sino una manifiesta (auto) acusación. En román paladino: "Si no te pido explicaciones no me las des; si lo haces será para enmendar tu acción". El que algo enmienda, algo erró; el que algo teme, algo debe. Sin embargo allá que voy yo y hoy haré todo lo contrario. Vengo a daros excusas. Vengo a autoimputarme. Jamás pensé que tantos conocidos leyérais este Rincón de mis Pasiones y por eso mismo os debo una disculpa por teneros algo de tiempo abandonados. Sé que no me habéis pedido explicación alguna pero aún así yo vengo a manifestarla. Me autoinculpo de haber estado muy ocupado laboralmente en el último tramo del mes de Julio y, cuando no lo he estado en ese aspecto, he gastado mi tiempo en eventos festivos, deportivos, veraniegos y de oscuro placer como es tomarme una jarra de cerveza helada en una terracita de verano o hacer barbacoa en el chalet.

No osbtante y lo crean o no sus Señorías ya que les estoy dando una excusa no pedida, os he tenido muy presentes en este tiempo, tanto que me habéis hecho sentirme como un buen escritor que tiene en desamparo a sus fieles lectores, más seamos serios en este pleito, en pleno estío ni yo tengo tanto tiempo de relato ni vuesas mercedes de lectura. Y al que lo niegue no le rogaré una excusa sino que lo acusaré directamente de falaz (salvo que sea una de esas personas que cabalgan con el portátil a cuestas y en cualquier bar o zona verde se conectan a una wifi gratuita y saborean una horchata a la vez que leen mi blog. Vaya para ellos mi admiración y mi piropo de locura).

Así pues, decía, estoy gozando desde el pasado día 1 de Agosto de mis vacaciones de verano lo que ha conllevado que los días justamente anteriores he tenido que atender mil y uno quehaceres y haya dejado escuetamente de lado el blog. Como bien sabéis soy un tradicional y clásico y debuté en casi vacaciones (y digo casi porque no lo estaba oficialmente) en la alegre fiesta de la Zurra. En la foto podéis ver mis zapatillas de la Zurra. Son las mismas desde el año 1994. Me las pongo únicamente para ese evento. Sólo ven la luz del sol durante las tardes de los días 30 de Julio año tras año. El resto del tiempo permanecen en una bolsa de Mercadona toscamente anudada y guardada en el patio de casa. Los que me conocen bien saben que esto que cuento es real y llevan gozando de la presencia de las zapatillas durante 18 años. Vamos que son unas zapatillas mayores de edad en esto de la Zurra. Son, poco más, que una institución y de corazón os digo que el año que viene volverán y seguramente sea su última Zurra (la zapatilla derecha ya está en avanzado inicio de podredumbre y descomposición). Resta decir que las zapatillas eran en su inicio unas Reebok "Above the Rim" y que nunca han sabido ni sabrán 1o que es pasar por la lavadora. Salen de la bolsa, las calzo unas horas, disfrutan de los efluvios de la Zurra, vuelven a su bolsa y al patio. Y así año tras año. La suciedad que llevan incrustada no es de este año, de hecho la foto está sacada justo antes de ponérmelas el pasado día 30 de Julio, la suciedad es el cúmulo y magia de años y años. ¡¡Tienen inclusive arena del Prado!! Ay, si las zapatillas hablasen...


Contada esta anécdota, merecedora de ello sin duda e igualmente contada porque yo quiero y no porque lo hayáis pedido (pero bien que os ha gustado a los que me preguntáis año tras año "¿Te vas a poner las zapatillas míticas para la Zurra?" y bien que os ha sorprendido a los que lo ignorábais), decir que en poco menos de una semana marcharé a Nueva York y no, no se me ha olvidado, sé que os debo una entrada, la última, sobre el Gran Viaje. El miércoles la publicaré. Mientras tanto os dejo estas acusaciones vertidas hacia mi persona, unas más reales, otras menos, otras rayando la absurdez, pero todas ellas verdaderas.

"No escribe porque le vencen los plazos judiciales y no tiene tiempo".
"No actualiza el blog pero bien que se va a jugar al pádel de 20 a 22 horas algún día que otro".
"Me lo he cruzado hoy y está saturado. Los últimos días de curro..."
"Nos tiene abandonados pero seguro que no tiene abandonada la maleta del viajecito de marras a Nueva York".
"Míralo, pasa del blog pero ahí va el tío con las zapatillas esas guarras a la Zurra. Escribir no pero cazos de vino sí."
"¿Fue a la Zurra? Pues esta mañana lo he visto yo en el Juzgado presentando escritos. No tendrá tiempo para el Rincón.
"¡Pues anda! Ni una mísera entrada nueva en el blog pero se toma una cervecita en Almagro al salir del Juzgado de ese pueblo."
"¿Sabéis qué? El otro día lo ví de barbacoa en el chalet..."
"Ya escribirá, ya, cuando se le pasen las ganas de Pandorga."
"Estando de vacaciones sí va a escribir, sí..."
"A ver cuándo vuelva qué excusa nos pone".

Y digo yo: ¿Os pido yo acusaciones? No, pero me las hacéis. ¿Me pedís vosotros excusas? No, pero os las doy. ¿Entonces? Como la vida misma, ladies and gentlemans. Os sigo escribiendo. Me seguís leyendo. Todos contentos. Las zapatillas en su bolsa desprendiendo todavía barro y olores a vino de este año. Y el blog avanzando y entreteniendo que para eso está. Perfecta simbiosis, queridos/as.
Y ahora os dejo que estoy de vacaciones y me voy a la piscina, a jugar al pádel, a hacer la maleta para el viaje, a preparar la barbacoa y a entrenarme para el Camino de Santiago. Y a disfrutar de mi mujer, por supuesto, que esa si que no permite cualquier excusa. Ya me entienden los varones y como dice el compadre Mario: "Vas listo si lo haces y si no lo haces vas listo".


Visto para Sentencia.