lunes, 5 de noviembre de 2012

TAPE-HALLOWEEN

Mi compadre y yo tenemos arte. ¡Qué coño! Derrochamos arte. Y categoría. Nos sobra. La vendemos al peso. Y vean ustedes lo que nos pasó a este par de artistas... Y juzguen.  El que suscribe estas líneas se hubo enterado de que, con motivo del Puente de Todos los Santos, un grupo de bares iba a realizar una edición especial del conocido concurso-ruta Tapearte. Venía como anillo al dedo. Les dejo las dos ideas y ustedes mismos las asocian. Verán que conjunción más buena. "Días festivos. Ruta gastronómica." Cabal, ¿no? Bien, pues a la sazón del evento Tapearte de Halloween como así lo denominaron algunos de los bares concursantes, Narciso y yo vimos las fechas que figuraban en la publicidad on line "Del 29 de Octubre al 4 de Noviembre" y allá que fuimos desde el miércoles noche, víspera de la Festividad de Todos los Santos (aprovecho: ¡¡Felicidades Froilán!! Cuidado con las escopetas, ¿eh?).

Derrochando arte nos presentamos en el bar Los Faroles en la Plaza del Pilar y allí iniciamos nuestro particular Tapearte halloweenero o Tape-Halloween como optamos por denominarlo. La fiesta yanki esta que nos va invadiendo cada año más no es que sea Santo de mi devoción (redunda la santidad de la Festividad de Todos los Santos, a todo esto ayer fue San Carlos, gracias) pero tratándose de menear el bigote comiendo y bebiendo hay que cumplir. Somos manchegos de buen llantar. ¡Qué leche ahora! Cogimos los panfletillos donde iriamos recopilando los sellos de los establecimientos que visitásemos y puntuando cada tapa de concurso y ¡alehop! a tapearnos que se dice. Los nombres de las tapas a juzgar eran, cuanto menos, curiosetes: Murciélagos de morcilla, Momias frankfurt, Tarántula de los Faroles, Cara de momia, Dedos ensangrentados, Huevos mutantes, Tripas de difuntos rellenas, Freddy cruje, Talentos de Hannibal Lecter, etc. Nosotros debutamos con unas ricas "Momias frankfurt" en Los Faroles.

Dos ejemplos de tapas "Momias"
Continuamos con unos "Talentos de Hannibal Lecter" en el bar España y nos dirigimos al Gabi a probar otras "Momias". Tras estas dos paradas, cervecitas y sello al folleto, fuimos a dar en el Miami Gastro, donde sin saberlo, pedimos la tapa que más adelante ganaría el concurso hostelero: "Huevos mutantes". La verdad es que estaba del carajo y a esas alturas nos comíamos lo que nos echaran encima, pues entre los bares que ya habíamos visitado por el Tape-Halloween y los que nos pillaban de paso y estaba feo dejarlos pasar sin más, la incipiente cogorza de cerveza ya afloraba y se hacía inminente. Nos fuimos, acto seguido, a la Taberna del Volapié y continuamos la jarana previa a las copitas que nos aguardaban en el Torreón, dando por concluida la primera ronda de Tape-Halloween. En total 7 u 8 cervezas y tan sólo 4 sellos en el folleto. Las cuentas no cuadran, compadre. O nos sobran bares o nos faltan sellos. Así están las cosas. Otro día más que para eso tenemos arte.
La Tapa ganadora: "Huevos mutantes"
Y tanto arte que tuvimos que el viernes completamos un sello nada más. La Taberna Volapié nos pierde. Lástima que este local no jugase al concurso gastronómico jalogüinero sino sí que lo habríamos pasado "de miedo". Otro día más que las cuentas no cuadran. Churrita, yo sigo en mis trece de que nos sobran bares. Ya lo terminaremos. Total, nos hacen falta como mínimo seis sellos y ya llevamos cinco. Una cervecita nos cabe en cualquier momento y ya tenemos el último sello y podemos concursar. Ele, el Domingo jugamos otro poco y ponemos el sello final.

Llega el Domingo y nos vamos a por el sello. El último sello. ¡Óle los notas! Esto está chupao. Nos dirigimos al bar El Toral y ... ¡tachán! Está cerrado. Bueno, vamos a otro. Dimos con nuestros cuerpos en La Dorotea. ¡Aquí está el sello! Pónnos dos cañas y de tapa dos "Caras de momia" de esas del concurso. Degustamos la tapita entregamos los folletos y... ¡Sorpresa, sorpresa! El establecimiento no tiene sello y la camarera en un arrebato de creerse Cristiano Ronaldo nos deleita con sendos autógrafos en el panfleto a Narciso y a mí. Pero... ¡¡oiga usté!! Esto no es serio. Esto no es un sello. Usted ha firmado en la casilla de su bar como si firmo yo. Esto no da fehaciencia ni prueba alguna de que yo he estado aquí. Pfff, vaya tela. En fin, a otro bar a por el dichoso sello. De esta manera llegamos al bar La Calle. Era uno de los primeros que íbamos a visitar y al final fue el último. Una de las tapas nos llamaba la atención: "Dedos ensangrentados".
Sería la última que tomaríamos y obtendríamos nuestro sexto y mínimo sello para concursar. La valoración del 1 al 5 se antojaba en el 5 aunque la tapa estuviera malísima. ¡Bien valía un 5 nuestro sello! Dos cervezas y "Dedos ensangrentados". Curiosa la tapa. Que cosa tan simple y que original la habían hecho. Nos la comimos tan felices y le entregamos los folletos al camarero para que nos sellara la oportuna casilla y... Y ahora es cuando. Señores y señoras, ahora es cuando viene de verdad el arte puro, el derroche, la elegancia, la categoría, la filigrana torera y taurina, el saber estar y el poderío que tenemos mi compadre y yo. El camarero se echa a reir y nos dice que para qué queremos el sello si el concurso ya había sido, si ya hay unos concursantes que han ganado el viaje y el bar ganador culinario ha sido Miami Gastro con los "Huevos mutantes". Miro a Narciso. Narciso me mira a mí. Los dos miramos buscando la cámara oculta y como ésta no aparece volvemos a mirar al camarero. El camarero no busca cámara oculta alguna y nos mira directamente (meándose de risa por dentro el muy mamón). Le preguntamos al unísono: ¡¡¿¿Cómo??!! Y nos espeta: "¿Habéis leído las bases del concurso? Ruta de Tapas de Miedo, del 29 de Octubre al 4 de Noviembre. Los concursantes podrán degustar las diferentes tapas de miedo y terror entre los días 29 de Octubre y 3 de Noviembre, concluyendo el acto el día 4 con el sorteo del viaje a los ciudadanos concursantes y premio al bar ganador." Como diría la clase política de este país "¡¡Manda huevos!!" (mutantes en esta ocasión). Estamos fuera de plazo y seguimos como tonticos buscando el sello perdido. Y pensando que podríamos ganar y todo. De chiste, oiga. Lo que no nos pase a nosotros no está escrito.

Resumen: Cinco días jugando al Tape-Halloween. Unos quince bares visitados nada más que para conseguir sólo cinco sellos (y la firma de La Dorotea). Fácilmente 20 o 25 cervezas tomadas para rellenar el folletillo de marras y cuando logramos cumplimentar lo imprescindible, el sexto sello (que nos lo pusieron en el bar La Calle por pena y como anécdota) resulta que ya no vale para nada. Somos unos campeones en toda regla. ¿Qué? ¿Tenemos o no tenemos arte? ¡Hombre, po favó!

3 comentarios:

  1. Jajajjajja.... Pero mucho arte!!! Ya me hubiera gustado ver esas caras, jajajaja... El año que viene a repetir, ajjaja

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  2. ...indudablemente tenemos mucho arte!!!!

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  3. El año que viene repetimos y con más arte todavía. Es más, si podemos rellenamos el folleto de una tacada. Verás tú que guasa.
    Besos a Keira y abrazos a NOR. Gracias por vuestros comentarios.

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