miércoles, 8 de agosto de 2012

VIAJE A NUEVA YORK (7ª PARTE)

Pues sí. Llegó la hora. El reloj cuenta atrás finaliza su función e indica que sólo quedan unas horas para que llegue el esperado día. Hoy empieza el viaje. Esta  noche saldremos en AVE hacia Madrid donde pernoctaremos en casa de nuestra amiga Alicia y su novio Javi (que por cierto se nos casan ya mismo). Mañana sobre las 07:30 horas estaremos en la Terminal 1 del Aeropuerto de Barajas y a las 10:25 horas despegará el avión que nos llevará a la Gran Manzana. Allí ya sabéis lo que haremos pues os he ido contando las rutas y excursiones programadas en diversas entradas anteriores. Sin embargo os debía una entrada y aquí está. Os anticipé que sería la última pero que habría una más sobre el gran viaje y ahora derramo letras dándole forma al post. Tan sólo espero que todos podáis visitar alguna vez Nueva York y comprobar por vosotros mismos todo lo que os he ido contando en las entradas referentes a esta enorme y cosmopolita urbe. Merece la pena y no poco.

Los últimos retoques han sido realizar el cambio de moneda y solicitar vía on line el ESTA. El ESTA es un visado (aunque los americanos dicen que no) que hay que solicitar y expedir obligatoriamente para viajar y acceder a Estados Unidos. Digo que es un visado (aunque los americanos digan que no) porque para que te expidan el mismo hay que abonar anticipadamente una tasa, lo que implica que estás comprando un permiso de acceso a un determinado lugar, lo que viene siendo... ¡¡un visado!! (por más que los americanos digan que no). Bien, pagada la tasa del ESTA hay que rellenar un curioso formulario (americanada pura) donde te preguntan cosas como si has tenido algo que ver con la Alianza Nazi alemana de la Guerra Mundial, si te has opuesto a la adopción de un niño estadounidense, si tienes alguna enfermedad contagiosa que pueda poner en riesgo la salud del pueblo estadounidense, etc. Y no estoy de cachondeo, ¿eh? Preguntan eso. Y lo que es más, como dan por hecho que todo el mundo dirá que "no a todas las preguntas", cuando por fin te expiden y envían el ESTA te hacen saber muy claramente: Usted puede viajar a los Estados Unidos de América y es apto para entrar en el territorio americano, no obstante, en la aduana, personal cualificado estadounidense tomará la decisión final". Dícese que con el ESTA o sin el ESTA, con tasas o sin tasas pagadas, con visado o sin visado, con pasaporte o sin pasaporte, como en el control de acceso fronterizo del aeropuerto no le caigas en gracia al personal no accedes a los Estados Unidos de América. Así de fácil.

La primera toma de contacto se produce en los accesos a la recogida de equipajes. Antes siquiera de recoger las maletas hay que pasar el control y hasta que no pones un pie legalmente al otro lado del control no tienes derecho a nada, eso sí, superado el control eres "ciudadano americano".
El control comienza con la toma de huellas. Hay un dispositivo en el que hay que poner la huella del pulgar de la mano derecha y, tomada ésta, la de los otros cuatro dedos de la mano. Acto seguido igual pero con la mano izquierda. Prestadas las huellas de los diez dedos, sí de los diez, de todos, no es como aquí para sacar el D.N.I. que bastan dos, comienza la sesión de fotos. La primera foto es general del tronco y cara, vamos como los presos. La segunda foto es exclusivamente de la retina ocular. Flipante pero cierto. Y con esa foto comienza la inspección pura y dura acerca de tu persona para determinar si eres realmente apto (aunque el ESTA diga que sí) para pasar a Estados Unidos. El ritual es el siguiente. Tus huellas dactilares y tu foto de la retina son enviadas vía intranet rápidamente al edificio central del F.B.I. situado en Whasington. Allí se procesan tus datos y se emite respuesta ultra rápida al acceso de control aeroportuario. Insisto en que lo que narro es real. En ese proceso que dura apenas tres o cuatro minutos, el funcionario, policía o agente que te está atendiendo te hace varias preguntas para entretenerte a modo "¿A qué vienes a Estados Unidos?", "¿Has estado ya alguna vez?", "¿Cuánto tiempo vas a estar?" y sin duda la mejor: "¿De dónde eres?" Mmmm, el personal cualificado y con mi pasaporte y mi D.N.I. en sus manos y en el mostrador, me pregunta que de dónde soy. Inquietante que no vean que soy español teniendo ellos mi documentación y estando fichado por el F.B.I. (que lo estamos todos, por cierto). En fin... americanos. Hechas las preguntillas de rigor para ganar tiempo y que el F.B.I. diga si soy apto o no (como en Selectividad, jaja) desde Whasington se emite una respuesta y la misma se refleja en el acceso. ¿Cómo? Muy fácil. Bajo el mostrador y a la vista de la persona que te atiende hay un pequeño semáforo en posición horizontal. Dependiendo de la respuesta tramitada y dada por el F.B.I. se enciende una luz u otra. Si se enciende la luz verde, el policía de turno te dirá muy sonriente el clásico "Welcome to the U.S.A.", podrás girar el torno y ya sí que sí eres ciudadano americano. Si la luz encendida es la amarilla o ámbar, la cara del policía se tornará seria y te dirá que puedes permanecer en Estados Unidos pero que estarás bajo control y permanentemente vigilado. Si el semáforo desprende luz roja, sin mediar palabra te arrestarán y te devolverán a tu país de origen en el siguiente vuelo hacia el mismo. Sin más, sin recoger equipaje ni nada. Lógicamente para que esto ocurra hay que tener unos antecedentes penales más que curiosos y el F.B.I. no te querrá ni ver por su país. La verdad es que a turistas normales, como nosotros, el semáforo nos deja pasar sin problemas; eso sí, que el F.B.I. nos tenga a todos fichados para decir si somos aptos o no, mosquea mucho. Hay que hacer el paripé hasta que Whasington dé luz verde a nuestra estancia.

Pues queridos amigos, el vuelo y el acceso de controles son los últimos escollos a evitar. Ya tenemos todo organizado y las maletas listas. Tenemos dólares y pasaportes en regla. Tenemos muchas ganas de que empiece esta magnífica aventura y los billetes de tren nos arden en las manos ya. Os pondré fotos cuando volvamos. Os regalaré una entrada fotográfica con algunos de los grandes momentos que vamos a vivir estos días. Prometo disfrutar por todos vosotros. Y ahora durante estos días disculpad mi ausencia. Ya se abren los controles... ¡¡Pasajeros al tren!!

GO TO THE UNITED ESTATES OF AMERICA!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario